A tan solo unos kilómetros del camping, las playas de la Bahía del Somme le proponen un sinfín de actividades. Aquí la vida transcurre al ritmo de la naturaleza y las mareas. Si es aficionado a las sensaciones fuertes, podrá probar un coche de vela, practicar kayak o speed sail, o recorrer un circuito por los árboles. Pero quizás prefiera admirar las maravillas naturales a su propio ritmo, caminar a pie, a caballo o en barco a lo largo de las playas de arena fina, visitar el Parque ornitológico de Marquenterre o practicar la pesca a pie en familia. Les encantará a sus hijos. Y hasta hay un trenecito que le permitirá descubrir los atractivos de la Bahía del Somme…